En muchas ocasiones, me pregunto a dónde quiero ir en mi crecimiento, ¿seré capaz de alcanzar los objetivos que deseo? ¿Porque no obtengo los resultados que deseo? Puede venirme a la mente muchas razones, sin embargo, hay una causa que no es fácil ver, y es el conocerse a uno mismo, te compartiré algunos tips que nos ayudara a conocernos más.
¿Qué tan bien me conozco?
Al momento de afrontar alguna actividad, problema, reto, etc. normalmente vamos a la acción y no reparamos si somos buenos o no para esto, y es aquí donde muchos de nosotros tenemos problemas, no sabemos cómo llegamos al éxito o no sabemos porque no lo alcanzamos, es usual justificar lo que nos pasa a situaciones externos, la política, dinero, etcétera, sin embargo, no reparamos si nosotros estábamos listos para iniciar esta aventura, pensamos que tenemos varias habilidades que nos ayudaran a alcanzar lo que buscamos. He visto a personas crear negocios y al paso del tiempo cierran estos negocios, yo he pasado por esa experiencia y sé que es difícil asimilarlo, al preguntarme porque no funciono, me doy cuenta que hay factores que no había tomado en cuenta, la primera que a uno se le viene a la mente es sobre si conocía como manejar este tipo de negocio y eso es importante, sin embargo, si analizamos un poco más, vemos que va más allá del conocimiento del negocio al que estoy participando, se trata de conocerme y ver qué pasa en mí para determinar si tengo los recursos necesarios para seguir en alcanzar mis objetivos.
¿Qué habilidades tengo?
Hay habilidades que nos hemos percatados que somos buenos, por ejemplo, el jugar cierto deporte, destreza en el dibujo, ser orador, ser bueno en matemáticas o la física, ayudar a las personas, etcétera, si tengo una idea que soy bueno, es importante saber que tan bueno soy y si eso es suficiente para lo que quiero hacer. Recuerdo cuando estaba estudiando en la Universidad, tenía amigos que les era fácil la clase de física y solo era necesario que llegaran a clase y hacer sus tareas para prepararse para el examen, simplemente eran buenos, sin embargo, si competían no sobresalían, al conocer a los otros competidores, nos dábamos cuenta que eran buenos igual que nuestros amigos, la diferencia es que ellos se preparaban, se apasionaban y siempre buscaban como aprender más, esto los ayudo a alcanzar un nivel más alto en esa área. En sí debo saber que tan bueno soy y si eso es suficiente para lo que quiero hacer. De igual manera, debo saber en qué áreas no soy tan bueno y evaluar como afectara en alcanzar mis objetivos, lo mejor es enfocar mis esfuerzos donde están mis fortalezas, de esta manera optimizaremos lo que haremos y seremos más estratégicos en nuestras prioridades Ahora bien, debemos recordar algo, vivimos en un mundo donde dependemos de personas para alcanzar nuestros objetivos, por lo que si nosotros no somos muy sociables o no somos muy buenos vendedores, debemos de hacer algo para vencer este obstáculo.
¿Quién soy?
Esta es una pregunta que no nos gusta hacer, es más fácil decirle a alguien que debe mejorar que decirnos a notros que debemos cambiar. Puede que rehuyamos al hacernos esta pregunta, al momento que tomamos conciencia de cómo somos puede que nos ayude a responder a ciertas situaciones que hayamos vivido y sean un factor para alcanzar o no nuestros objetivos. Podemos hacernos estas preguntas:
- ¿Cómo me ven los demás? Si nos da miedo hacer esta pregunta a las personas, ya podemos comenzar a sospechar que no nos gusta recibir retroalimentación de otras personas, debemos de meditar porque nos afecta.
El recibir retroalimentación de las demás personas es importante ya que es frecuente que reflejemos algo y no darnos cuenta, puede que nos sintamos contentos y nuestra cara refleje disgusto, en lo personal lo he vivido. A veces hacemos daño a nuestros seres querido por nuestra forma de ser, puede que no lo hagamos premeditadamente por lo que la retroalimentación nos servirá mucho para entender como somos hacia el exterior.
- ¿Soy una persona difícil? Puede que pensemos que no lo somos, esto puede ser crucial en nuestras relaciones, puede hacer que un objetivo no se alcance, las personas no les gusten estar con nosotros, he escuchado a varias personas decir que ni ellas misma se soportan. Cesar Lozano en su libro «El lado fácil de la gente difícil» define a la gente difícil como: «Son personas con múltiples conflictos sin resolver, pretenden mantener o agrandar su imagen a costa de lamentarse de todo, chantajear emocionalmente, tienen miedo de ser agredidas en alguna forma, y tratan de dañar la imagen de los demás«, puede que sintamos que seamos personas difíciles o tengamos a alguien así en nuestro entorno, debemos de trabajar en este punto para poder alcanzar nuestros objetivos, en sí, debemos crecer.
- ¿Sé a dónde ir? Cuantas veces nos preguntamos que queremos, si estamos contentos con la vida que llevamos, puede que respondamos rápidamente si estamos contentos o no, lo que nos puede llevar más tiempo es responder si sabemos en dónde queremos estar a mediano y largo plazo, evadimos contestarnos a nosotros mismo si ya sabemos que queremos hacer, como será ese camino, si ya lo estamos haciendo, hay personas que ya saben lo que quieren y lo hacen.
- ¿Cómo soy? Para crecer debemos saber cómo soy, que temperamento tengo (colérico, sanguíneo, melancólico o flemático), como esta mi autoestima, como es mi carácter, como veo la vida, me considero un líder, soy introvertido o extrovertido, como veo a las demás personas etc. estos factores son importantes para poder alcanzar mis objetivos, por ejemplo, si deseo ayudar a las demás personas es necesario saber que pienso sobre ellos, si pienso que mi ayuda a las personas tiene que ver con un intereses personal, va a ser difícil que sea exitoso a largo plazo.
- ¿Quiénes están en mi entorno más cercano? Si deseo desarrollar ciertas habilidades, ayudara más si mi entorno está formado de personas que tienen esas características, creceré más rápido, también está el lado opuesto, puede que estas personas me impidan en desarrollar estas habilidades que deseo trabajar.
- ¿Tengo un plan? Esta es la pregunta fácil de contestar para muchos de nosotros cuando queremos crecer, la respuesta común es no, el paso a seguir es comenzar a trabajar en un plan y es acá donde nos cuesta comenzar, no queremos salir de nuestra zona de comodidad, ya que, al confeccionar un plan, pondremos fechas y evitamos comprometernos.
- ¿Soy disciplinado? Puede que nos preguntemos, ¿qué tiene que ver ser disciplinado? Tiene que ver, ya que al querer cambiar en algo o hacer una actividad, lo que me motivo a hacerlo solo es la chispa, la disciplina nos mantiene firmes en lo que queremos hacer, una actividad puede durar mucho tiempo y la motivación no basta, puede que tengamos problemas personales y la motivación en ese momento ya no tiene la misma llama, la disciplina sí.
Al poder contestar estas preguntas y hacer lo necesario para que podamos llegar a una respuesta afirmativa en cada pregunta, nos ayudar más a ser conscientes que se necesita para mejorar en nuestro crecimiento y lo que deseamos.
«El primer paso hacia el cambio es la conciencia. El segundo paso es la aceptación«. Nathaniel Branden.
Referencia:
15 Leyes Indispensables del crecimiento. John C. Maxwell
El Lado Fácil de la gente Difícil. Cesar Lozano.
Acerca del autor:
Jorge Paz es Coach, Consultor y autor del libro Forjando Nuestro Destino. Con más de 10 años en la gestión de proyectos de implementación de software, experiencia de supervisión, soporte y evaluación de proyectos. Ha trabajado en proyectos en varios países de Latinoamérica apoyando a equipos de proyectos en alcanzar sus objetivos.